lunes, 24 de octubre de 2011

Gangster de ultratumba*



Hay muchas campañas de lectura que pretenden acercarnos a los libros: porque nos hacen mejores personas, porque nos crean una conciencia crítica, porque estimulan la imaginación, pero pocas nos dicen que se puede leer por diversión. Para eso, claro está, se requieren textos que sean entretenidos, que su historia avance de forma atractiva y que los personajes sean verosímiles y cercanos al lector para que éste pueda identificarse con ellos y de esta forma disfrutar lo que se narra. Gansgter de ultratumba, de Rafael Tonatiuh (Xalapa, Veracruz, 1964) es una muestra de este tipo de libros que se disfrutan y nos dibujan una sonrisa.

Alevy, “Ale” para los amigos y “Don Alevi” para sus subordinados, es un joven científico que viaja a Las Vegas para intentar volverse millonario. Lo acompaña su novia Bethzy, quien ve esas vacaciones como una oportunidad para comprar algunos recuerdos, visitar algún museo y conocer el campus de la Universidad de Nevada. Ambos, sin embargo, desconocen que son los personajes centrales de una conspiración cósmica en la que la existencia del universo está en juego y, curiosamente, cada que Alevy arroje los dados sobre alguna mesa de craps se desencadenará el “final”.

En esta aventura los acompañarán algunos arcángeles enviados por el Sacro 1, y convivirán con espíritus malignos que encarnarán en sus cuerpos, así como delincuentes famosos y diosas de la belleza. Así, Alevy será poseído por Samael, un ser divino que anhela adueñarse de Las Vegas para aumentar la energía negativa universal y así lograr la desaparición de nuestra realidad (consiguiendo con ello la derrota de Sacro1). Pero para esto deberán recurrir, también por medio de la encarnación, a Bugsy, un jugador profesional que vivió a principios del siglo XX y quien participó en la fundación de Las Vegas. Por su parte, Bethzy se convertirá en la depositaria de las almas de Virginia Hill, la amante de Bugsy, y de Lilith, aquel ser primigenio que se reveló a Sacro 1.

Gangster de ultratumba, con estos personajes, se convierte en una mezcla de El Padrino con ciertas novelas de Raymond Chandler, donde enormes negros ataviados de forma atractiva se convierten en los eslabones de la historia. Además, combina una prosa divertida y precisa. Por ejemplo, el narrador cuenta: “Alevy lo miró con ojos de un rinoceronte con encabronadamente mal humor” o se escucha a Lilith decir: “¡No soy una dama, pendejos, así que dejen de hablar como Shakespeare en mi presencia!”.

Además, esta novela de tintes policíacos, se permite las reflexiones (“¿Cuál es el motivo por el que existe todo? Porque Dios lo creó. ¿Y por qué Dios lo creó? Para auto-conocerse”) con la broma recurrente, como cuando en medio de una escena melodramática el narrador se inmiscuye con un detalle para hacernos reír: “Sacó de sus bolsillos un mechón de caireles envueltos en cinta roja y lo arrojó en un tambo de basura orgánica (la lata de refresco la depositó en la basura inorgánica)”.

Con una mezcla de arcángeles que se drogan y otros que quieren vacaciones para pintar sus casas, recuperar discos prestados y escribir poesía, Gangster de ultratumba muestra el tono relajado que Rafael Tonatihu utiliza en sus columnas de Milenio Diario, al mismo tiempo que nos muestra a un Patricio Betteo (ilustrador del libro) que logra darle vida a estos personajes con trazos muy al estilo del libro vaquero o de Frank Miller (si es posible esta relación). Así, esta novela es el perfecto ejemplo de por qué se debe leer: porque hacerlo, al igual que ver la televisión, jugar al billar o entretenernos con un videojuego, resulta divertido.

Tonatiuh, Rafael (2008), Gangster de ultratumba, México, Editorial Resistencia, 120 páginas.

* Publiacado en Elhorizontal.com

No hay comentarios:

Publicar un comentario